Esponjas de baño: consigue una piel suave ahorrando en gel y descubre cuál te va mejor

En: 27 / 06 / 2018 Comentario: 0

Dale los buenos días a tu piel con un masaje tonificante con tu esponja favorita y gel de baño, te activarás rápidamente. Además, ahorrarás en gel, porque solo con unas gotitas y la esponja humedecida verás la cantidad de espuma que consigues y cómo cundirá el jabón.

Pero, lo más importante es que un masaje con esponja tiene múltiples beneficios:

-          Al realizar una suave exfoliación tu piel estará más lisa y suave. Con un tono uniforme y lista para que tu bronceado quede bonito. Eliminar las células muertas y evitar que se acumulen en la piel es esencial para mantener la piel tersa y con un aspecto saludable, además ayuda a evitar los pelitos enquistados.

-          Si empiezas desde los tobillos , dando un masaje circular y vas subiendo, activarás la circulación y si te atreves a aclararte con agua fresquita, empezarás el día con mucha energía

-          Disfrutarás de un momento de confort y relax que te reconcilia con tu cuerpo. Un ritual de belleza cotidiano fantástico.

¿Quieres saber qué esponja te va mejor?

Lo primero es fijarse en tu tipo de piel y tus preferencias por tejidos naturales o sintéticos. Existen esponjas en ambos materiales con distintos niveles de suavidad.

 

Si tu piel es sensible es mejor no frotarla en exceso, utilizar esponjas muy suaves como las naturales, las de rizo de algodón o las de konjac combinadas con un gel de baño especialmente indicado para pieles con tendencia al enrojecimiento, atópicas o con acné. El konjac es una planta de origen asiático utilizado desde tiempos milenarios, en los últimos años la cosmética coreana ha destacado los beneficios de estas esponjas naturales. Para hacerlas se utiliza la raíz de la planta, con un alto contenido en fibras naturales capaces de capturar y absorber agua. Cuando está seca su superficie es rugosa y áspera, pero cuando se humedece se transforma en una sorprendente textura blanda y suave.  Además, es biodegradable.

 

Si disfrutas de una piel normal que no tiende a enrojecerse puedes usar esponjas con mayor poder exfoliante, como las de malla, de sisal o sintéticas. En las zonas delicadas del cuerpo, como escote y cuello no es recomendable frotar excesivamente, pues la piel es más fina y delicada. Y si no llegas a la espalda siempre puedes utilizar un cepillo de cerdas naturales que dejará la piel de tu espalda suave, suave.

 

Y para pieles grasas o muy resistentes, el guante de crin o sisal es perfecto, realiza una exfoliación profunda y elimina el sebo y la suciedad.

 

Consejos para conservar tus esponjas en perfecto estado y evitar las bacterias

-          Aclárala después de cada uso para que no quede ningún resto de jabón

-          Escúrrela bien y cuélgala, lo ideal sería en un lugar ventilado y seco. Hay que evitar los ambientes cálidos y húmedos.

-          Para evitar bacterias y gérmenes es importante que las esponjas sean de uso individual y cambiarlas con frecuencia. En el caso de las naturales cada 3 semanas -1 mes, las sintéticas duran un poquito más y puedes cambiarlas cada 2 meses.

-          Las esponjas naturales puedes desinfectarlas una vez en la semana con unas gotas de lejía diluidas en agua, aclárala bien y déjala secar antes de volver a utilizarla.